Después de muchos años de desinformación y sobretodo de despreocupación, nuestra sociedad ha ido tomando conciencia y comprendiendo lo necesario que es incorporar el concepto de sostenibilidad en todos los aspectos de nuestra vida, tanto en el ámbito económico, como en el social y medioambiental.
Por definición, sostenibilidad se refiere a la satisfacción de las necesidades actuales sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras, se trata de crear un desarrollo en el modo de progresar para crear un equilibrio entre el hoy sin poner en peligro los recursos del mañana. En materia ambiental, se trata de preservar la biodiversidad sin renunciar a un progreso económico y social.
En España la flota pesquera es una de las más grandes del mundo, y es una de las principales actividades económicas del país. El problema es que según la FAO (la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) el 31% de las poblaciones pesqueras mundiales están sobreexplotadas, un 58% está plenamente explotada, un 90% de las poblaciones de peces del mar mediterráneo está sobreexplotado y además un 40% de las capturas mundiales no son deseadas y se devuelven al mar en mal estado. Uno de los motivos de estas cifras es la pesca de arrastre siendo la culpable de la destrucción de los fondos marinos.
Por todo ello para preservar el futuro de nuestros mares se han creado sellos que controlan y certifican la realización de una pesca sostenible, y uno de los más importantes es el sello MSC. ¿Pero qué es MSC? Estas siglas responden a Marine Stewardship Council, organización internacional sin ánimo de lucro cuyo objetivo es el de propiciar la transformación de los mercados de productos del mar hacia unas bases sostenibles,promocionando y reconociendo la buena gestión pesquera.
El certificado MSC solo se le entrega, después de una evaluación exhaustiva por expertos que miden los estándares de calidad, a pesqueras que se implican evitando la sobrepesca, que dejan suficientes peces en el mar para su futura reproducción y renovación, manteniendo así la salud y productividad del mar. Se debe respetar la estructura, la función y diversidad de los ecosistemas y hábitats marinos, minimizando los impactos sobre otras especies, teniendo especial cuidado con aquellas protegidas o amenazadas. Además es imprescindible una buena gestión que permita que la pesquería se adapte a cambios en el medio marino.
¿Qué es MSC en cuanto a la preservación del futuro medioambiental? Es la garantía vital de la biosfera marina y de que nuestras próximas generaciones puedan seguir disfrutando de un ecosistema marino sano y con diversidad, por el contrario, si terminamos destruyendo nuestros mares acabaremos por destruirnos a nosotros mismos.